En 1920, el entrerriano Enrique Telémaco Susini encabezó en la Argentina el proyecto que llevó a la primera transmisión de radiodifusión pública en el mundo, realizada el 27 de agosto, anterior incluso a la que se efectuó en noviembre en los Estados Unidos, en ocasión de la elección presidencial celebrada en ese país. Así, Radio Argentina se convirtió en una de las primeras estaciones de radiodifusión con programación regular en el mundo. En honor a esta epopeya, en Argentina se celebra el Día de la Radiofonía Argentina.
Nació en Gualeguay, el 31 de enero de 1891. Durante las décadas de 1920 y 1930, se convirtió en un exitoso empresario de las nacientes industrias de la radio y el cine. Siguiendo su carrera en los medios, también fue fundador de los estudios de cine Lumiton, y fue el Director General de la primera transmisión de televisión en Argentina realizada por Canal 7.
El arte, la ciencia y la innovación fueron las grandes pasiones de este hombre tan singular y multifacético. Además de médico brillante fue músico y compositor, el primer cineasta argentino premiado en un festival de cine, precursor, inventor, investigador científico, empresario, réggiseur y promotor cultural.
En 1925 conoció a Albert Einstein. El padre de la Teoría de la Relatividad no dudó en calificarlo como “una de las primeras inteligencias de la Argentina”.
Su actividad cinematográfica dejó una profunda huella en el cine argentino, siendo director de cine, guionista y fundador de la productora Lumiton. También compuso la música para su película Embrujo de 1941.
La primera transmisión
Luego de volver a Argentina en 1919, Susini comenzó a trabajar en la conversión de un viejo lugar de espectáculos cirquenses al Teatro Coliseo. Junto con sus amigos, comenzó a planear la realización de una transmisión de difusión general desde allí, algo que fue incentivado por los dos dueños italianos del teatro Faustino da Rossa y Walter Mocchi.
Durante 1920, mientras el grupo estaba trabajando en el proyecto, llegaron versiones según las cuales Marconi había realizado exitosamente la transmisión experimental de un concierto de la soprano Nellie Melba en Chelmsford, Inglaterra, el 15 de junio. Aunque esto pudo haber sido una desilusión por no haber sido su transmisión la primera del mundo, los preparativos continuaron a paso rápido.
El 27 de agosto, finalmente estaban listos. El teatro presentaría la ópera Parsifal de Richard Wagner. Susini y sus colaboradores habían instalado un transmisor de 5W en el techo utilizando válvulas marca METAL de origen francés traídas por Susini, con una antena conectada a la cúpula de un edificio cercano. Para tomar el sonido del teatro colocaron un micrófono con una bocina de gramófono en la sala de reflectores.
Aproximadamente a las 20.30, el mismo Susini tomó el micrófono e inauguró la radiodifusión argentina con las palabras: “Señoras y señores, la Sociedad Radio Argentina les presenta hoy el Festival Sacro de Ricardo Wagner, Parsifal, con la actuación del tenor Maestri”.
La transmisión continuó por aproximadamente tres horas y fue recibida tan lejos como Santos en Brasil, donde fue escuchado por el operador de radio de un barco.5 El número de oyentes estimado en medio centenar, fue muy limitado porque las radios a galena de la época eran escasas y difíciles de operar, requiriendo el tedioso ajuste de un pequeño cristal de plomo y la instalación de una antena de varios metros de largo. Sin embargo, el diario La Razón publicó una nota muy alentadora, e incluso el presidente Hipólito Yrigoyen felicitó a Susini y su grupo por sus logros.